Los delfines chillan cuando consiguen darse el gusto de comerse un pez y emiten un sonido similar al de un niño feliz. Investigadores estadounidenses han asegurado que creen que estos sonidos no son sólo una forma de señalar a los otros en el grupo que hay comida en los alrededores, sino expresiones de puro placer. Extracto del estudio publicado en el Journal of Experimental Biology (en inglés):
jeb.biologists.org/content/217/16/2910.abstract?sid=f39a0b11-5451-46dd