"La sorpresa de este disco viene de la mano de Julian Sitkovetsky [...] que según David Oistrakh "habría eclipsado a todos los violinistas soviéticos si no hubiera muerto tan joven". Eclipsar al propio Oistrakh o a Leonid Kogan no hubiera sido asunto fácil para Sitkovetski de haber vivido, pero mientras estuvo en este mundo [...] fue un artista de enorme magnitud. Su sentido de la línea, la pureza del fraseo, la intensidad del arco, la exactitud del ataque, todo luce en él con una musicalidad excepcional" (Luis Suñén, Scherzo nº 107, IX-1996)
|
etiquetas: música clásica , fonografía , composiciones de 1904 , grabaciones de 1953