En la Sevilla del siglo XV, un hernista conocido como “maestro Pedro”, cobró 700 maravedíes y 20 fanegas de trigo a un paciente que finalmente falleció. Tras ser denunciado por sus familiares ante el Tribunal del Protomedicato, este dictaminó que no tenía licencia para ejercer, siendo condenado al considerar que sus actividades eran del todo ilegales. El intrusismo médico es algo que siempre ha existido y por desgracia sigue estando presente en nuestros tiempos, aunque ya encontramos en el siglo XV intentos por controlarlo.
|
etiquetas: medicina española , doña isabel , don fernando