Parece que la presión que sienten estos jóvenes aumenta cada vez más. Una vez iniciada la etapa de educación secundaria, los exámenes de fin de año determinan sus aspiraciones universitarias y, posteriormente, están los exámenes de acceso a la universidad. Escuchamos muchas conversaciones sobre los millennials privilegiados, pero todo lo que puedo ver en mis hijos y sus amigos es el terror al mundo en el que se mueven y la sensación de estar en una rueda de hámster que nunca se detiene.
Comentarios
Pues yo todos lo que conozco son unos joseadores, saben donde está la línea y la cruzan y la vuelven a cruzar, y cuantos menos recursos tienen más a la periferia del sistema están.
Aunque al principio no compartía ni entendía muy bien el artículo, después de leerlo entero, lo apoyo bastante.
Me ha parecido interesante.
Seres de luz
Futuros lubricantes biologicos.
💂
(falta un monigote de terminaitor)
No sé qué presión tendrán en el instituto, pero a la universidad llegan peor pero preparados que nunca.
Lo segundo
#5 Yo viví como se iba cayendo el sistema educativo curso por curso.
Primero la ESO, luego Bachiller y al final la universidad/FP.
Muchos profesores no daban crédito, y los que seguían con el método antigüo no paraban de recibir olas de quejas y suspensos.
Me ha engañado el artículo. Pensaba que al final la niña era sorprendida por su papaíto en el cosplay de un centro comercial en alguna promoción de un producto anime o hollywoodiense, la firma de discos de un popstar para adolescentes o algo así, pero no.