Existen fórmulas establecidas sobre cómo debería comenzar un cuento infantil; “érase que se era…” o “hace mucho, mucho tiempo, en un reino lejano…” son, precisamente, dos de estos comienzos típicos. En el caso de las narraciones para adultos, el inicio de la historia, que nos predispone para prestar atención a lo que nos van a contar, no se da de una forma tan encorsetada, y esto es más cierto aún en el caso de la novela. Un comienzo atrayente, que capte la atención del lector, es algo fundamental, y puede marcar la diferencia...
Comentarios
También son importantes los finales: colorín, colorado, este cuento se ha acabado.
#2 y fueron felices y ella le comió la perdiz...
Estoy con #3 "Érase una vez..." "Once upon a time..."
Erase una vez, no erase que era, que clase de cultura
muy interesante. Meneo al canto!