Por intentar ser mas astuto que el zorro, fue engañado al comprarlo por internet;el truco de la estafadora estaba en que nadie denuncia una compra o estafa fraudulenta cuando se pretende comprar un animal en peligro de extinción o cuyo tráfico está prohibido.
Comentarios
Los animales no deberían ser mercancías.
A lo mejor sólo quería bajarse el Firefox, y se lió...
pues que le den, que se compre conejos enanos como yo...
Otro gallo le hubiera cantado si se hubiese tratado de zorras.
Que zorro pillado.