Si con mucha ilusión alguien le regala un pastor alemán de porcelana de tamaño natural por su cumpleaños, lo más probable es que diga "muchas gracias" y que sonría como pueda. Aunque le parezca un perro absurdo y esté maquinando que para tirarlo a la basura lo más práctico será romperlo a martillazos. A un cortés "¿qué tal?" en el ascensor de la oficina, poca gente respondería...
Comentarios
Y nunca es lupus.
La mentira es, lamentablemente, una herramienta social muy util.
La sobredosis de ZP tiene que ser hasta mala para su salud.
La dosis y el grado