La administración del presidente Obama está solicitándole a la Corte Suprema que no admita el primer caos recibido sobre el controvertido espionaje cibernético de la NSA. Los abogados gubernamentales argumentan que el tribunal supremo no tiene la jurisdicción para admitir el caso, presentado en julio por el Centro de información íntima electrónica (electronic privacy information centre, EPIC). El EPIC cree que la NSA se extralimitó en su autoridad para monitorear y vigilar comunicaciones mundiales y exigió la detención del programa.