El Cherokee, el idioma nativo más hablado en Estados Unidos, se ha enfrentado a retos a la hora de adaptarse a la moderna tecnología. No utiliza el alfabeto latino, sino un alfabeto silábico (como el japonés) que fue creado en 1821. Hoy en día el uso del Cherokee en las modernas tecnologías (como los smartphones o los ordenadores portátiles) es posible gracias a una comunidad de activistas del lenguaje que se han preocupado por mantenerlo vivo y adaptarlo a los tiempos modernos.