Se trata de un documento de 28 folios en el que los indignados proponen cambios que afectan desde la retribución a la clase política hasta nuevas medidas legales de fiscalidad medioambiental. El 'Movimiento 15-M' pide que se expulse de su escaño al político tránsfuga, que se moderen los sueldos de concejales, diputados o presidentes autonómicos y que se potencien mecanismos de participación ciudadana como los referendos.