Tal como se esperaba, la doceava entrega de los Game Developers Choice Awards –cuyo anfitrión fue Cliff Bleszinski–, consagró a The Elder Scrolls V: Skyrim como el mejor exponente de la industria del entretenimiento electrónico a lo largo del último año. El equipo completo de desarrollo, liderado por el emblemático Todd Howard, pasó al estrado para recibir la distinción que en otros años ha honrado a juegos de la talla de Grand Theft Auto III y Half-Life 2.