#14 vaya libro malo, pero malo malo. Me lo terminé por coraje, porque me lo había empezado. Pero para mi fue una pérdida de tiempo. Por una vez, admito que una película "basada en" supera con creces al libro del cual proviene.
#117 ojala no se te muera el hijo por dejar a tus hijos que la naturaleza decida... supongo que tampoco los vacunas... la naturaleza los protegerá no sufras...
#18 Completando lo que comentas, también es necesario además de haber comunicado la deuda, que esta sea deuda cierta, vencida y exigible. Lo que quiere decir que si la deuda se encuentra reclamada, por ejemplo por no haber contratado el servicio del que te exigen la deuda, no se puede incluir en registro de morosos al no considerarse que la deuda sea cierta.
Tengo entendido que el sistema tampoco funciona automáticamente diciendo que si se abre una reclamación de la deuda, tenga sentido al reclamación o no, no te pueden meter en la lista (antes si que era así creo recordar), pero si al reclamación tiene base, entonce no es legal meterte en la lista, ya no se exactamente quién decide el criterio de que tena fundamento la reclamación o jo, imagino que la administración competente (AGPD llegado al caso).
#17 Siento ser tan pejiguero y puntilloso, pero el relato no trata de cáncer. Trata de violencia.
El el pueblo del acuífero sólo ha habido 2 casos de asesinatos creo recordar. Y los 2 por foráneos.
Es por eso que utilizan el compuesto para vaporizarlo sobre una errupción volcánica y esparcirlo por el mundo.
Eso sí. El relato me encantó. Se llama "El final del desastre" de la serie "Pesadillas y alucinaciones".
Se ha llevado a la pequeña pantalla pero el escrito es muy difícil de superar.
a ver si nos enteramos esto no es una buena noticia
Es como si yo dijese ¡que bien no estoy arruinado! ¡me han concedido una hipoteca que tendré que tendrán a pagar en los próximos 200 años! #53 has dado en el clavo
#12 Si se aportaran nuevos argumentos, nuevas propuestas me parecería fenomenal. Pero repetir siempre lo mismo una y otra vez me resulta cansino. Menos hablar y más actuar, que es muy fácil cambiar el mundo desde el sofá.