Invierno de dos mil nueve... Florencio se siente extraño en esta mañana de jueves. Hace frío y al mirar en el almanaque de pared (obsequio de Caja Rural) descubre que esa misma noche es nochevieja. Con la lentitud que dan los setenta y cuatro años...
Brutal. Es un texto buenísimo. Me he quedado sin palabras y en algún punto de la narración se me ha puesto un nudo en la garganta. Gracias por el envío #0.
Comentarios
Brutal. Es un texto buenísimo. Me he quedado sin palabras y en algún punto de la narración se me ha puesto un nudo en la garganta. Gracias por el envío #0.
Que barato y sencillo es ser feliz... y que pronto se me olvida
Simple y llanamente genial. Sin palabras. Una realidad estremecedora.