John Kennedy Toole jamás vio publicada su obra. Al parecer, envió el original de la novela a varias editoriales; todas la rechazaron. Poco tiempo después, el autor decidió quitarse la vida. Su madre, al encontrar el manuscrito años después, lo llevó a distintas editoriales. Volvieron a rechazarla en numerosas ocasiones. Empeñada en su publicación, ya que pensaba que la novela tenía una calidad notable, se puso en contacto con el escritor Walker Percy (autor entre otras de la novela El cinéfilo, con la que había tenido un considerable éxito) para que la leyera y consiguiera su publicación. Percy cuenta en el prólogo de La conjura de los necios que, al principio, receló de leerla. Pero, tras mucho insistir, aceptó hacerlo y quedó maravillado: no le parecía posible que la novela fuera tan buena. La novela recibió el premio Pulitzer, y fue un éxito editorial, apareció en las listas de libros más vendidos en muchos países. es.wikipedia.org/wiki/La_conjura_de_los_necios
CC @IgnatiusJReilly
#1 Tranquilo, a mí en cambio alguna vez me ha tocado corregir publicaciones a la página oficial de fb See Spain (TURESPAÑA). Haber cuando aprenden que la mayoría d los correctores no interpretan las oración, si no que las comprueban palabra a palabra
#44Me estoy dando cuenta que la libertad de expresión en Menéame solo alcanza al voto. Explicadme eso... ¿Vosotros podéis votar y yo no puedo opinar sobre ese voto? Muy democrático. Si, señor...
Respeta el voto de los demás si quieres que respeten tu opinión y tus envíos. No pidas a nadie que justifique su voto. El voto es personal y no necesita ser justificado ante nadie. Intenta evitar quejarte de los votos negativos, no vas a conseguir nada positivo, la lectura se vuelve densa y aburrida, y se pierde el hilo del tema de la noticia.
Espero no oíros nunca opinar sobre el sentido del voto de los diputados en el Parlamento..
Menuda tontería, ¿de verdad te parece lo mismo un voto en menéame que un voto en el Parlamento? Comparación absurda.
#28 El clamor popular por el morbo no es un argumento. Además, no estamos hablando de un fallecido de enorme relevancia para todos, sino del sufirmiento de una periodista que no es precisamente la más famosa del gremio. Es algo que a muchos no nos parece noticia, sino un drama que no debería salir de su ámbito familiar.
Pero el tema en realidad era otro: vota y deja votar, qué es eso de andar forzando el voto según tu criterio, que obviamente puede no coincidir con el de los demás.
#3#4#9
Pues a mi si me parece irrelevante. Muere mucha gente a la semana por leucemia o cánceres varios, y no veo el porqué es más relevante para algunos porqué se trate de un personaje público...pero bueno, por temas que se me asemejan al sensacionalismo, lo puedo llegar a entender.
Es una desgracia le pase a quien le pase, y no veo todos los casos llegando a portada.
#3#4#9 ¿Podéis dejar que cada cual vote lo que le de la gana? Puede haber gente que no conozcan a esta persona, o que consideren que darle bombo al empeoramiento de la enfermedad de alguién es simple morbo que no ayuda a nadie y no es informativo. O que consideren que tal vez su familia prefiera dejar esto en el ámbito personal.
#3 Bueno, quizá nosotros no tanto, pero alguien tan preocupado en teoría por si nace o no un feto... debería saber que hay personas hacinadas en centros y cómo se llaman aunque sean siglas, vamos, ¡digo yo!
#24www.meneame.net/legal.php#tos
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#7#13 Hay que zanjar este debate de una vez y para siempre. La tortilla es como la Coca-Cola: No hay Coca-Cola Con y Coca-Cola Sin; hay Coca-Cola y Coca-Cola sin cafeina, sin azucar, sin lo que tú quieras. Pues la tortilla igual: Hay tortilla y tortilla Sin cebolla.
Sorry! 
John Kennedy Toole jamás vio publicada su obra. Al parecer, envió el original de la novela a varias editoriales; todas la rechazaron. Poco tiempo después, el autor decidió quitarse la vida. Su madre, al encontrar el manuscrito años después, lo llevó a distintas editoriales. Volvieron a rechazarla en numerosas ocasiones. Empeñada en su publicación, ya que pensaba que la novela tenía una calidad notable, se puso en contacto con el escritor Walker Percy (autor entre otras de la novela El cinéfilo, con la que había tenido un considerable éxito) para que la leyera y consiguiera su publicación. Percy cuenta en el prólogo de La conjura de los necios que, al principio, receló de leerla. Pero, tras mucho insistir, aceptó hacerlo y quedó maravillado: no le parecía posible que la novela fuera tan buena. La novela recibió el premio Pulitzer, y fue un éxito editorial, apareció en las listas de libros más vendidos en muchos países.
es.wikipedia.org/wiki/La_conjura_de_los_necios
CC @IgnatiusJReilly