#3 Lo cual también es bastante curioso porque, como muy bien sabemos todos los que no somos unos demagogos trasnochados, con Franco no había paro y todo el que quería trabajar, trabajaba y le llegaba para pagar el piso, el sercientos y hasta irse de vacaciones al pueblo o al apartamento.
Una bajada a la realidad basada en la memoria. Más artículos como este y menos invenciones para el odio.