Como ya es habitual la Guardia Urbana tuvo que intervenir un macrobotellón multitudinario que se organizó la tarde-noche de Navidad en la calle Mandri, en el distrito de Sarrià-Sant Gervasi. En la fiesta se concentraron 2.000 jóvenes, y la policía municipal tuvo que cortar el tráfico adyacente para evitar complicaciones, algo que no gustó a algunos de los vecinos. «Vamos a ver, resulta que en la calle Mandri hay 1000 cayetanos haciendo botellón y la Guardia Urbana les cierra la calle para que estén tranquilos». «Es lo de cada año».
|
etiquetas: barcelona , calle mandril , macrobotellon , quejas
Cuando es cosa de gente de bien, se les corta la calle para que se emborrachen tranquilos.
Que la Guardia Urbana haya cortado la calle y no los haya desalojado lo que hace es mantener el ruido ahí. No obstante son fiestas de Navidad y la gente suele ir a dormir algo más tarde. Pero vamos, que es un problema entre pijos, lo que en Madrid sería entre Cayetanos.