Hablar de fraude científico puede parecer un tema menor, un tipo de 'dopaje académico' que sólo afecta a los investigadores y a los aficionados a la divulgación científica. Pero es algo un pelín más serio. No debemos olvidar que la que muchos consideran como causa del revival actual del "movimiento antivacunas" fue un fraude científico que tardamos más de 12 años en retirar: el estudio que Andrew Wakefield publicó en 1998 relacionando la vacuna de la triple vírica con el autismo. Poca broma. relacionada(ENG):
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