Popularmente conocida como Claro de luna (en alemán: Mondscheinsonate), fue escrita por Ludwig van Beethoven en 1801. El tercer y último movimiento, Presto agitato, está en la tonalidad inicial, en compás de 4/4 y sigue la forma sonata. Supone un experimento de Beethoven que consta de rápidos arpegios, escalas y un juego hábil de preguntas y respuestas entre las dos manos. La dificultad de ejecución es muy elevada, en contraste con los movimientos previos. https://es.wikipedia.org/wiki/Sonata_para_piano_n.%C2%BA_14_(Beethoven)#Composici%C3%B3n
#2 iba a poner la interpretación de la pieza por otra pianista, pero aunque tiendo a separar el arte de pensamientos políticos, me resultaba dificil en ese caso.
Se llama Valentina Lisitsa por si quieres buscarla.
Una de las pocas personas que tiene doble pasaporte, Israelí y palestino. (Bueno, triple, también es argentino). Ejemplifica muy bien al tipo de habitante de la zona que a mi juicio debemos apoyar.
Comentarios
Sublime
#0 que barbaridad, gracias
#2 iba a poner la interpretación de la pieza por otra pianista, pero aunque tiendo a separar el arte de pensamientos políticos, me resultaba dificil en ese caso.
Se llama Valentina Lisitsa por si quieres buscarla.
Esta version con guitarra electrica es una pasada:
#6 Impresionante
#12 Y eso que Liszt no tenía la excusa de estar sordo cuando la compuso...
Es complicada, sí, pero ojo, no es de las MÁS complicadas de Beethoven.
Sonata 29, también interpretada por Barenboim.
#11 Otra pieza complicada al piano, en este caso de Liszt:
La parte complicada empieza a partir del minuto 5:40, más o menos.
Fantabuloso!!!
Una de las pocas personas que tiene doble pasaporte, Israelí y palestino. (Bueno, triple, también es argentino). Ejemplifica muy bien al tipo de habitante de la zona que a mi juicio debemos apoyar.
#1 y también tiene el español
¿ Sería posible que esta pieza la estémos tocando acelerada ?
https://www.nationalgeographic.com.es/ciencia/resuelto-misterio-metronomo-beethoven_22980
Este Antony Hopkins no deja de sorprender, cuantos talentos ocultos!